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viernes, 18 de enero de 2013

Sabias que tus emociones pueden ser la causa de tu sobrepeso o de tu obesidad?




Dentro de mi experiencia personal y mi lucha de años en contra de mi obesidad, me encontré con una sorpresa extraordinaria. Por alguna razón habían momentos en mi vida en que haciendo absolutamente nada de lo que normalmente se hace para adelgazar, perdía peso de manera dramática y sin explicación. Luego,  sin una razón aparente comenzaba rápidamente a ganar peso de nuevo. Fue entonces cuando me comencé a dar cuenta de que mi obesidad no estaba directamente ligada a lo que comía o a cuanto ejercicio hacía, sino mas bien a la RAZON por la cual comía, y a como me sentía en ese momento de mi vida.



Obviamente, cuando era más feliz, más libre, y más simple, comenzaba a perder peso. Y de paso perdía interés en las comidas altas en grasas, sin que me tuviera  que  esforzar siquiera un poco.

La comida y el ejercicio son importantes, pero te puedo asegurar que no son causa de tu sobrepeso.  Si no, ¿Cómo explicamos que miles de personas en el mundo puedan comer sin medirse y nunca engordar? ¿O como explicamos que personas que aún comiendo puras ensaladas no logren perder un peso considerable y permanente en el tiempo? Bueno, la razón está dentro de nosotros, somos seres increíbles, tan complejos, que aún nos cuesta una enormidad comprender como funcionamos. YO me pasé unos 13 años sin entenderlo, y ahora aunque queda camino por recorrer, tengo la claridad para bajar los brazos y dejar de luchar con mi cuerpo en una guerra por forzarlo a hacer lo que no estaba programado para hacer.

No podemos luchar con un gigante de aire, jamás lograremos siquiera darle un golpe, pues su inexistencia es tan absoluta como nuestro inmenso poder para amaros y sanarnos.

Merecemos ser felices, merecemos ser livianos, merecemos ser delgados, merecemos ser libres… no porque seamos mejores que otros, si no porque nuestro estado natural es así. Cuando nacemos no nacemos gordos, nos engordamos con el paso de los días, los meses y los años.  Porqué condenarte a permanecer gordo, si tu jamás decidiste conscientemente serlo?, no hay razón más que un aprendizaje erróneo para que estés así.


Nuestras emociones serán  quienes nos indicarán el camino, y nuestra mente,  la llave maestra a la libertad y la plenitud… ¿crees que puedas hacer las pases con lo que sientes? 

Buenisisima Suerte!! :) 


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